Más allá de lo básico: ¿Qué sucede realmente en tu cuerpo durante la cetosis?

Así que has comenzado una dieta keto, reducido carbohidratos y tal vez incluso visto algunos resultados. Pero ¿sabes qué está pasando realmente dentro de tu cuerpo mientras cambia a cetosis? Vamos a desglosarlo más allá del cliché de “quemar grasa como combustible.”

Primero, está la fase de adaptación (días 1–3). Tu cuerpo agota el glucógeno almacenado y podrías sentirte lento o irritable—hola, “gripe keto.” Luego viene la cetosis temprana (días 4–7), donde tu hígado comienza a producir cetonas, pero los niveles aún son bajos. Para la cetosis completa (a partir de la semana 2), tu cuerpo se vuelve eficiente usando cetonas y los niveles de energía se estabilizan. Pero aquí está la clave: la cetosis nutricional (0.5–3.0 mmol/L de cetonas en sangre) no es una zona única para todos. Factores como el ejercicio, el sueño e incluso el estrés pueden hacer que entres o salgas de cetosis a diario.

¿Por qué importa esto? Muchos que siguen la dieta keto asumen que están “en cetosis” basándose en conjeturas—como la reducción del hambre o ese aliento metálico. Pero sin medir cetonas, vas a ciegas. Los métodos tradicionales como las pruebas de sangre con pinchazo en el dedo (dolorosas e incómodas) o las tiras de orina (poco fiables después de la adaptación) dejan vacíos.

Ahí es donde brilla el sensor de Monitoreo Continuo de Cetonas (CKM) de SiBio. A diferencia de las mediciones esporádicas, nuestro dispositivo portátil de 14 días rastrea cetonas 24/7, mostrando datos en tiempo real en tu teléfono. Ya sea que estés ajustando macros, experimentando con ayuno intermitente o simplemente tengas curiosidad por cómo te afectó ese brownie keto, el sensor CKM te ayuda a ver tu estado metabólico—sin pinchazos en los dedos, sin conjeturas.